domingo, 23 de noviembre de 2008

Caricias positivas.

Si no fuera porque de vez en cuando nos dedicamos a compartir elogios con la gente que queremos, la vida sería un paso triste y solitario por el mundo. Lo malo es que pocas veces nos acordamos de cuidar a los que tenemos más cerca y, a cambio, les "regalamos" nuestros bufidos.